El otro día hice un brownie de chocolate blanco, pues ahora somos adictos a este tipo de bizcocho, y ahora le toca el turno del brownie de chocolate crujiente.
Lo hice, porque quería saber, si me empezaban a salir, y siiii !!!! ya me salen, debe ser que le he cogido el truquillo a esto de los brownies jeje
En fin, por ahora me van saliendo, no se mañana si me seguirán saliendo. No me puedo quejar.... Ya veremos...
Os dejo la receta por si alguien se anima a hacerla
Ingredientes
200 gr de chocolate negro
170 gr de mantequilla en pomada ( temperatura ambiente )
199 gr de azúcar blanquilla
130 de harina bizcochona ( Mercadona )
3 huevos
50 gr de avellanas machacadas u otro fruto seco a vuestra elección
Elaboración
Precalentamos el horno a 170 º
Colocamos el chocolate y la mantequilla en un cuenco y lo derretimos en el micro, a pequeños golpes, para que no se queme el chocolate. Y reservamos
Añadimos el azúcar y mezclamos bien, Agregamos la harina y mezclamos bien, hasta que este todo bien integrado. Y añadimos los huevos y seguimos mezclando. Tengo que decir, que para esta receta no hace falta varillas, ya que con una espátula se puede hacer bastante bien.
Mezclamos hasta que este todo bien integrado y consigamos una masa homogénea-
En una picadora o mortero, machacamos las avellanas y la incorporamos y volvemos a mezclar
Echamos la masa en una fuente previamente untada con mantequilla y espolvoreada de harina, sacudimos la sobrante, lo metemos en el horno, y a esperar hasta que este hecho el brownie durante 30 - 35 minutos.
Si vemos que la parte de arriba esta crujiente retiramos, no importa que no este hecho por dentro´pero si lo queremos mas hecho lo tenemos que comprobar con un palillo, si este sale limpio, pues lo sacamos y dejamos que se enfríe en una rejilla antes de desmoldar...
Una vez hecho, ya lo podemos disfrutar... Pero tiene un peligro; se acaba inmediatamente.
Lo llevé a casa de mi hermana, y claro, pues solo me devolvieron la fuente vacía, snif, snif, Pero tengo que reconocer, que lo hemos probado y nos hemos mirado con una cara de: " ¡ mmmmm, que bueno ! "