Mira tu por donde, me he encontrado muchas veces este cupcake tan curioso, pero nunca me había atrevido a hacerlo. Me daba cosita....
Pero un día me animé y este es el resultado
Ya se, que no me han salido muy bien, pero era la primera vez....
Mi hija, estaba como loca, con tanto chocolate..... ¡ Pegaba saltos de alegría !
Pero vamos con la masa: Ya sabéis que la adapto un poco por mi marido, que es diabetico
100 gr de harina ( bizcochona de la marca Mercadona )
20 g de cacao sin azúcar ( lata de Valor )
que por cierto, tengo que comprar mas.
100 gr de azúcar
1 1/2 cucharadita de levadura
Aceite de oliva suave, un chorrito
120 ml de leche
1 huevo
1 cucharadita de agua de azahar
Ponemos el horno a pre calentar, yo lo pongo a 150 º ya que mi horno es pequeñito
Ponemos en un bol, los ingredientes secos previamente tamizados, mezclamos y reservamos.
En otro bol, ponemos los ingredientes húmedos, y los batimos hasta conseguir que estén totalmente ligados.
Incorporamos los secos en los húmedos por tandas, y batimos, con las varillas, hasta que hayamos acabado con los secos, y estén totalmente incorporados a los húmedos.
Los ponemos en nuestras cápsulas de cupcakes, y al horno. Ya sabéis que no hay que abrir el horno, hasta pasado unos 15 minutos, y cuando pinchemos con un palillo, y salga limpio, pues ya podemos sacar nuestros cupcakes, y lo dejamos que se enfríen en una rejilla.
Mientras están en el horno, podemos hacer el frosting:
Para el frosting
3 claras
Un poco de azúcar glass tamizada
He leído un montón de veces, que para levantar las claras, hay que ponerlas en el Baño María....
Pero a mi nunca, me ha salido. Yo lo hago de la siguiente manera.
Levanto las claras, según salen de la nevera, con las varillas électricas, y al final cuando ya casi están levantadas, le incorporo el azúcar glass, pero poco a poco, hasta desear el dulzor deseado.
Cuando, ya lo tengamos listo, se sabe cuando se forman piquitos, o no se caiga del recipiente en el cual hemos levantado las claras.
Ponemos el merengue, en una manga pastelera, con la boquilla redonda, y lo ponemos sobre nuestros cupcakes.... y lo metemos en la nevera.
Mientras se van enfriando, vamos a hacer esa cobertura de chocolate, que al enfriarse, y morder un trozo hace ¡ cruch !
Para el chocolate
350 gr de chocolate negro
3 cucharadas de aceite
Derretimos el chocolate con el aceite al Baño María, y le damos vueltas hasta que este totalmente derretido.
Lo dejamos enfriar por espacio de 15 minutos, y ya podemos sumergir nuestros cupcakes, y salen así, de esta forma tan curiosa.
Se meten en el frigorífico, hasta que no los vayamos a comer.
Acabas con la cocina, llena de chocolate y de cacharros, pero merece la pena...
A mi me ha gustado formales, y luego darles el baño de chocolate, que es muy divertido.